Arianna Damanti España

Arte y Entretenimiento

Ser buenos en los trabajos manuales. Algunos falsos mitos

2018-11-19 23:14:02

¿Cuánta gente, por lo menos una vez en la vida, ha tenido cierta atracción por los trabajos manuales? Y ¿cuántos ni lo han intentado por culpa del falso mito del “no tengo talento para esto”? Con este artículo me gustaría disipar algunas creencias comunes, y no lo hago solo como artesana de profesión sino también como profesora.

Estoy en el sector de la joyería desde hace veinte años pero he empezado a dar clases solo el año pasado. Y mientras mis alumnos aprenden el arte de la orfebrería, yo aprendo a destruir todos esos prejuicios y falsos mitos a propósito de la capacidad personal de aprender trabajos manuales. Aquí tenéis una lista de algunos, entre los más importantes.

1. No tengo talento

Esto es el pretexto más común para renunciar ya desde el principio. Es el prejuicio peor porque nos pone límites ya antes de empezar, dejándonos frustrados y con un sentido de inferioridad hacia los que muestran talento en este campo.
Es muy común entre las personas inseguras y con falta de autoestima.

2. La artesanía se aprende en juventud

Otro pretexto, generalmente utilizado a partir de los 40. Es muy peligroso creer en esto, si lo hacemos nunca nos daremos la oportunidad de descubrir nuestros talentos, envejeceremos antes de lo previsto y acumularemos remordimientos.
 

¿De verdad es así?

Tengo 18 alumnos entre los 25 y los 54 años y de once países diferentes, entre los otros también Afganistán. Cada uno de ellos representa una historia: cultura, motivación y objetivos personales diferentes el uno con el otro. En todo caso es posible hacer estadísticas.
He creado un programa didáctico tal que ya desde los primeros tres meses de curso TODOS tengan que realizar objetos específicos, solo siguiendo mis instrucciones.
Mi método se basa en la postura (sobre todo en cómo colocar brazos y manos) y en el uso correcto de las herramientas de trabajo. En fin, sencillamente técnica y disciplina.
Esto dicho, resulta que:

- el 100% de los estudiantes realiza completamente los objetos previstos por el programa;
- el 90% los realiza en los tiempos establecidos;
- el 80% los realiza de manera casi perfecta;
- solo el 3% consigue realizar el objeto solo al segundo intento;
NADIE renuncia ya desde la segunda clase.

Entonces ¿tengo que pensar que todos los alumnos que llegan a mis cursos siempre son personas con mucho talento? Claro que no.
¿Algo tiene que ver con la cultura, la motivación, la edad? Tampoco.
¿Y cómo consiguen estos resultados? ¿Cuáles son los ‘truquitos’ para guiarlos durante el aprendizaje?

Si sois profesores o estáis aprendiendo cualquier tipo de artesanía, el próximo artículo es para vosotros…

¡STAY TUNED!