PARA REFLEXIONAR.
En estos años he casado aproximadamente a 150 parejas, la verdad aún recuerdo la primera vez que lo hice y la pareja en cuestión, que por cierto aún están juntos con hijos ya grandes.
De ese número cuatro fracasaron matrimonialmente.
También de todas esas parejas que case casi 40 yo los presente, y prácticamente hice papel de cupido o casamentero ayudándolos a llegar al matrimonio, de los cuales dos también fracasaron.
La causa? casi siempre ha sido la misma, hombres que piensan que la mujer debe soportar todo... descuidos, violencia, maltratos, ofensas, faltas de iniciativa, motivación e insatisfacción sexual, falta de atención para mantener enamoradas a sus mujeres, pornografia en fin. Pero cuando todo está a punto de terminar quieren correr a resolver las cosas siendo ya demasiado tarde.
Lo peor es que algunos me han culpado a mi solo por haberlos casado, porque creían que había magia en el cura el sacerdote o el pastor, y nunca asumieron las responsabilidades propias de pareja.
Hay quienes creen que cuando la biblia dice, “lo que Dios unió no lo separe el hombre” significa que se casan para ser infelices para siempre y hay que calarsela, porque si, o cuando dice “el amor todo lo soporta” es qué hay que aguantar ofensas, humillaciones, violencia y pare de contar, pero eso no es así, las personas se casan para ser FELICES.
Dos cosas que reflexionar.
1º. NO ESPERES A QUE SEA DEMASIADO TARDE PARA QUERER CAMBIAR O RESOLVER LOS PROBLEMAS.
2º. NO BUSQUES CULPABLES DE DONDE NO HAS TENIDO EL VALOR DE RECONOCER TUS PROPIAS FALLAS.
Porque si te vuelves a casar así te case el Papa, Benny Him, Dante Gebel, Paul Washer o el mismo Jesucristo se volverá a repetir la historia.
Fin de mi reflexión.